Crisanto Gregorio León: Henryna Martinelli

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El cómplice del crimen de la corrupción es generalmente nuestra propia indiferencia. Bess Myerson.

Tesis y antítesis.- Los grupos delincuenciales traídos por las ya ausentes santafesina Roxana y por la operada Maurén la ex cogobierno corrupto del “destituido” coronel psicópata; cohabitan operativos en vinculación dentro de la institución. No olvidemos que el “nepote” del agente 750 conocido como el asistente virtual – el amor de labio mordido de Maurén – lidera los vínculos sociales pero también se mantiene en pugilato por esas tesis de las coimas en dólares, con la tribada And la Reina y Henryna Martinelli ahora trasladada al departamento endémico, donde las contiendas por los billetes verdes son del mismo modo tesis de grandes controversias, que resuelven en “martilleo” con la cacica Bizzy entre droga cola y nicotina. Vemos cómo Lozada arropó y acogió para sí, “la crema y nata de la delincuencia organizada” de Julio Vásquez. De esta manera, la ingrata Jeanette Carla, golpeadora de Ananás la ex estilista del coronel psicópata, desde USA donde reside; dirige su propio Gedo dentro de la institución y en canonjía aún aparece en la nómina de la empresa cobrando sin trabajar; mientras en trinomio con Cara de July y su amiga la recién reclutada Rosenthal, sus comercios criminales son las tesis por todos conocidos.

Amiguetes del desenfreno en el cují y otras migraciones +.-  Podríamos decir que en materia de corrupción, extorsión y martilleo, como también en la venta de documentos de comprometida legitimidad un grupo “no binario” domina en la institución tentacularmente. Son pues la propia Henryna Martinelli, Jeanette Carla, And la Reina, la entrante Rosenthal y en su área de influencia la oficial Borromea Lesbia Carlota. ¿Pero qué hacen integradas a ese grupo la cacica Bizzy y la colombiana Cara de July? Aunque es comprensible pues son las jefas, también nos han referido que es un grupo practicante del BDSM, por eso del refrán: “dime con quién andas y te diré quién eres”. Con una cara de tabla, Bizzy ha arropado protectoramente a And la Reina, a Henryna Martinelli y a Cara de July, monas voladoras jalabolas de Julio Vásquez. En realidad no asombra la cohesión criminal entre sus integrantes, toda vez que son el ariete de la delincuencia intramuros en la institución desde una de las columnas de corrupción como lo es la oficina endémica. En psiquiatría, tal vez algunos se aventurarían a decir que  es un grupo con patologías mentales, prognosis que  es para otra epístola.

¿Quién es Rosenthal?-   Cara de July tenía que tirar los dados y  apostar a Rosenthal. La babieca no puede operar sola, pues Rosenthal tiene tanta improbidad como ella para eso de las tesis de corrupción. Ambas son equipo desde atrás, y la colombiana se empeñó por su ascendencia sobre Bizzy para “al fin” ingresar a Rosenthal a la institución. Recordamos la frase de El Libertador “el talento sin probidad es un azote”. Estas dos, a modo de Bonnie y Clyde, hacen una banda, en esencia corrupta y de alto perfil criminal.

El talento sin probidad es un azote.- Este pensamiento de El Libertador Simón Bolívar, hace referencia a que poseer talento y no tener ética, es una verdadera desgracia, una calamidad. Un hombre puede poseer mucho talento, o mucha capacidad para el estudio o evocar conocimientos, pero si no tiene ética, no es capaz de vencer su sentido de la desproporción al actuar, al hablar o al hacer cosas realmente detestables e innobles. Un hombre o una mujer con talento y sin probidad es alguien innoble que no puede ni podrá nunca alcanzar el respeto de nadie, ni siquiera de sí mismo o misma; porque alguien con un sentido retorcido de las cosas, jamás gozará de la estima ni del aprecio de nadie, solo de quienes son como él o ella, porque los burros del mismo pelo cuando se ven se saludan. Se puede ser una persona muy inteligente o destacada en alguna ciencia o actividad, pero carecer totalmente de principios morales o éticos; porque se puede poseer un  conjunto de facultades o capacidades tanto artísticas como intelectuales; pero ni la más remota convicción de lo correcto o incorrecto desde el punto de vista deontológico o de la conducta moral o normativa. Una persona así nunca tendrá paz en su conciencia, en caso de que pueda tener conciencia porque si la tuviera no actuaría tan desatinadamente.

La conciencia ética.- Recordemos un pensamiento del autor de Los Miserables Víctor Hugo, «La conciencia es la presencia de Dios en el Hombre» de modo que quien no tiene a Dios consigo, no tiene conciencia y hace cualquier daño y se siente justificado o justificada, porque cree tener con toda vanidad el derecho de hacerlo. Desenvolverse con ética es actuar con probidad, es valorar y sopesar las cosas y las situaciones, es saber ser prudente a la hora de hablar y de actuar. Todo lo contrario es desarmonía de la personalidad es una verdadera desolación del alma. Veamos pues dentro del cuadro de consideraciones que pueden dársele al vocablo azote tenemos: calamidad, plaga, epidemia, desastre, catástrofe, castigo, adversidad, infortunio, desgracia. ¿Y para quienes son estos epítetos o adjetivaciones? Son para quienes carecen de ética y poseen talento usándolo maligna y perversamente  y para quienes corrompen igualmente los valores sociales y las expectativas que tiene el conglomerado de poseer ciudadanos probos e instruidos y viceversa. Pero es que gentuza como estas son idiotas morales, individuos incapaces de comprender los principios y valores morales e  incapaces de tomar decisiones y actuar en concordancia con ello. Los idiotas morales como Cara de July y Rosenthal junto a todos los delincuentes ya nombrados, pueden ser muy astutos y funcionar perfectamente como hábiles sinvergüenzas.

Los “picapasito” o la urbe de paja y el fuego en el rabo.- ¿Cuál es el aire corrupto y pestilente que emana de ellos? ¿Qué impulsa y emociona luego a estos “ciudadanos enmascarados” a querer entrar y mantenerse allí en la institución ostentando algún grado de autoridad, toda vez que es una de las más corruptas de la región? ¿De dónde procede cada uno de estos picapasitos personajes? ¿Qué hacía cada cual antes de entrar a la institución? ¿Cuáles escándalos protagonizaron en sus anteriores empleos? ¿Si todos estos además del estupro tienen como común denominador “actuar con malicia y solapadamente” en función de la corrupción que lideran? ¿Entonces quien o quienes los alienta y los cohesiona para depredar de esta corporación? ¿Acaso por pertenecer todos a una “orden”, se convidan y se llaman al estilo de Maurén porque allí es donde se consigue dinero negro y  mal habido? Pues sí, todos son caimanes del mismo pozo, son las mismas fétidas miasmas. No son ninguno de ellos los mejores ejemplos para ser emulados por los usuarios. ¡Que porquería de legado! En todo caso, es hartamente conocido el trío del cují integrado por Henryna Martinelli, Jeanette Carla y el depuesto Ananás, por sus corrupciones y orgías, excesos y drogas.  E igualmente se conoce a la tribada And la Reina que desde la escuela a la panadería ha dejado el hedor de su indecente incorrección, pero es tomada allí dentro como “una zorra” por su astucia criminal, por sus putrefactos disvalores, por su frialdad ante un terminal de computadora alterando cifras y lavando y levantando controvertidas tesis a cambio de muchísimos dólares, siendo la anterior delfina de Chabela y ahora de la cacica Bizzy; a la par de la hedionda babieca Cara de July cuyos escandalosos comportamientos y corruptelas son conocidas en toda la urbe. ¡Que denigrante equipo conforma la oficina endémica!  Y al hablar del dúo del vicio y la corrupción, como pestes que producen teorías y tesis envenenadas, que les deja “muchos dólares sin declarar ni al fisco ni a las contralorías”, es obligante referirnos a Cara de July y a Rosenthal, como el dúo  infernal.

La cacica Bizzy, entre droga cola y nicotina.- ¡No hombre Bizzy, cuanta  decepción! Los encuentros  públicos para distraer la intención de sus reales propósitos, entre Henryna Martinelli y Bizzy, como preludios a la corrupción enmascarada, encendieron las alarmas luego que se constataron los encuentros furtivos entre droga cola y nicotina, donde esta jefa recibe y se moja las manos con las tributaciones de “los martilleos”. Teníamos de Bizzy una imagen de honestidad y decencia, pero como castillo de naipes se nos cayeron las expectativas de su desempeño.

Castillo de naipes.- La autenticidad ante todo, ello es lo que nos diferencia a unos de otros y lo que hace medir cualitativamente la dimensión personal y entre muchas cosas el don de gentes de cada cual. Cada quien sabe cómo es, cuáles son sus debilidades y virtudes, cada uno aborda el mundo según la propia visión y hay quienes se atreven a acariciar la idea de que los demás cambien su paradigma de vida sustituyendo la propia personalidad por una personalidad huésped que no es la auténtica. Algunas personas consiguen su cometido a través de influencias cautivantes por aparentar ser dignas de admiración y otras lo logran para sojuzgar lo bueno en beneficio de lo pérfido. Cuando alguien se muestra particularmente recto o recta y en razón de esa impresión que causa o pretende causar, las personas sin tener mayores elementos para opinar diferente, pudieran ser engañadas en su buena fe. A veces nos encontramos con quienes predican rectitud, honradez, respeto a las normas, sobriedad, ecuanimidad, objetividad, un desapego a lo material y una aparente vida espiritual, cuando todo es una burda mentira para sorprender incautos. En momentos en que la vida pudiera colocarnos en actos de especial reflexión, luego de haber exaltado a alguien que habías colocado como ejemplo de virtud y sensatez; pero que en un momento inesperado desnude su personalidad y que mostrándose cuál es, te percatas que la rectitud en ella es una línea zigzagueante o tortuosa a conveniencia, que la honradez es sólo un envoltorio diseñado para encubrir una perversa médula, que no hay respeto por las normas porque las aplica selectiva y alcahuetamente, porque su aparente moderación es sólo una mampara para encubrir su carácter escandaloso, que nunca ha sido íntegra porque se devanea entre el oportunismo y las apariencias, porque es connivente con lo inmoral y lo espiritual no es más que un blasfemia. Como un castillo de naipes derribado por una sorpresiva brisa, así quedan sobre el piso las falsas virtudes que incautamente creímos emperifollaban en algún momento a quien blandiendo estandartes de decencia y rectitud, ahora descubres que es puro cuento.

Aprendan del armiño.- Entérense cuerda de corruptos, banda de inmorales, que el armiño es un animalito que prefiere morir pero no ensuciarse.  En cambio ustedes son unos animales que prefieren ensuciarse el alma, las manos y el prestigio, la visión que sus hijos y familiares puedan tenerles; antes que renunciar a la corrupción; porque sucumben frente el soborno y la extorsión, el martilleo, las coimas, la venta ilícita de documentos ilegítimos con visos de legitimidad. Pero toda la sociedad y los que están en el medio saben en lo que ustedes están, aunque se hagan los desentendidos, los ingenuos, los inocentes, los huevones. Es que entre cielo y tierra no hay nada oculto. Y todos están pillados. Les cuento del armiño que representa la pureza, que este animalito prefiere morir a cambio de no mancharse de barro cuando se siente acorralado; además de que representa la moderación pues se alimenta una vez al día, en cambio ustedes exigen y reciben droga cola y nicotina, desayunos, almuerzos, cenas y muchas otras coimas (muchos billetes verdes); para aceitar sus vicios e impudicias, para darle la alegría corrupta a quienes los sobornan con grandes sumas en dólares. Ustedes a distinción del armiño, están cebados y todos untados de mierda. A diferencia del armiño, les encanta, les gusta y buscan sentirse acorralados para que los ensucien y recibir dólares por ventas ilegales, extorsiones y coimas. El armiño cuando se le va a cazar y se siente acorralado contra el barro, prefiere primero dejarse atrapar que llenarse de barro. En cambio  ustedes buscan que los usuarios los ensucien y se sepa a “vox populi” lo mucho que les gusta el barro; porque les gusta la suciedad de la corrupción. Por el contrario se dejan ensuciar porque son corruptos y además pierden sus almas y su endeble prestigio y gritan en sus insanas mentes ¡ensúciennos, ensúciennos! y promoviendo que les gusta estar llenos de mierda, dejan correr la voz del monto de sus tarifas y con el mayor desparpajo se dejan identificar precisamente para que los ensucien. Jefes de indecencia y trampa de la institución que al saberse deformes éticamente, ni se les ocurre despreciar el barro ni huirle al barro, ni sacarle el cuerpo al barro; ni desestimar las coimas, ni los dólares de las extorsiones; pues esos billetes verdes así ganados destilan y representan el excremento que los perfuma y la inmoralidad y la depravación que los caracteriza. Ustedes como que no están enterados en sus mentes sobre la verdadera misión, visión, fines y objetivos de esta otrora noble institución. Vinieron a joder el prestigio y la filosofía que inspiró su creación, pues sus productos también salen corruptos.

Por eso estos inmorales como Henryna Martinelli y su banda, prefieren estar sucios que ser íntegros, prefieren la indecencia que la pureza.

La corrupción de una cosa, corresponde necesariamente a la generación de otra. Aristóteles.

crisantogleon@gmail.com

 

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