En total incertidumbre se encuentra el sector agrícola, debido al anuncio que hizo el 2 de febrero el presidente de la República, Nicolás Maduro, sobre el cese de las exoneraciones tributarias en Venezuela.
El Agro, considerado prioritario para el país, ha venido siendo eximido del pago de compromisos fiscales, tales como el ISLR (Impuesto Sobre La Renta), durante más de dos décadas, del IGTF (Impuesto de Grandes Transacciones Financieras), durante todo el año pasado y del IVA y aranceles aduaneros para la importación de semillas certificadas, agroquímicos y maquinarias agrícola.
Pero tras 45 días del anuncio presidencial y sin hasta ahora haber salido una Gaceta Oficial sobre el tema, desde Fedeagro sigue haciéndose cualquier tipo de conjeturas, alegando que de concretarse esta medida el precio de los alimentos podría registrar un aumento de entre 20 a 40% este año.
Existen varias preocupaciones en el sector agrícola: la falta de financiamiento, la escasez de diésel y ahora parece que le quieren quitar el IVA a las semillas que vienen importadas. En Venezuela todavía no tenemos soberanía en semillas ni en agroquímicos ni en maquinarias o repuestos. Pareciera que vamos a un desmontaje del IVA y tal vez colocarán aranceles, eso nos va a incrementar los costos de producción y sería una amenaza para nuestros productores, sobre todo para los medianos y pequeños, que no tienen acceso a créditos y la mayoría hace esfuerzos gigantescos para seguir cosechando, expresó Celso Fantinel, presidente de Fedeagro, durante la Expo Congreso Nacional del Maíz, que se desarrolló del 14 al 16 de marzo en la ciudad de Barquisimeto.
El agro tiene 23 años sin pagar ISLR. Pero ese incentivo fiscal venció el 31 de diciembre del año 2023, y hasta ahora ni el Ministro de Agricultura y Tierras ni la Vicepresidenta de la República han firmado una extensión.
Consideramos que cobrar ISLR en un sector tan informal, a mí me parece que no es el momento. Aquí hay que preparar a los productores, sobre todo los campesinos que no tienen contabilidad, que no tienen la manera de llevar un balance y puedan pagar este impuesto. Además, muchos productores han llevado al Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), la solicitud de exoneración y no se las han adjudicado, advirtió.
Ana Uzcátegui – La Prensa Lara
