Eumenes Fuguet: El general Antonio Vicente Valero de Bernabé Pacheco

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Prócer emancipador puertorriqueño y ventrílocuo.

Del extenso grupo de oficiales que participaron denodadamente en beneficio de la emancipación suramericana, destaca el puertorriqueño Antonio Valero de Bernabé, de experimentada actividad militar en España, México, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.

También conocido como “El Libertador de Puerto Rico”, por sus afanes en liberar la isla.

La historia y tradición lo recuerdan, por su cualidad natural poco conocida en la época, de ser “ventrílocuo”, don que le permitió salir airoso en situaciones peligrosas ante los realistas, como también jugarle bromas pesadas a compañeros de armas y amigos*.

Este ilustre personaje nació el 26 de octubre de 1790, en la población de Fajardo, ubicada al Este de la isla, hijo del español Cayetano Valero, oficial realista y la borinqueña Doña Rosa Pacheco.

Apenas cumplidos los trece años, debido a la muerte de su padre, su tío lo envió a España a estudiar la carrera de las armas, ingresando como cadete.

Este imberbe soldado combatió contra las fuerzas napoleónicas en el sitio de Zaragoza.

A pesar de recibir heridas en los diferentes combates, su valor e inteligencia, le permitieron rápidamente ascender de grado en grado según el escalafón.

A los diecinueve años, es coronel del ejército español. A los veintiún años se casó en Cartagena- España con María Madrid, con quien procreó dos hijos.

En 1820 se trasladó a México, donde ocupó el cargo de jefe del estado mayor del ejército mexicano. En tierra azteca recibió la “Medalla de los Libertadores de México”.

Cuando se percató, que el nuevo gobierno es de tendencia monárquica, se retiró y escogió como futuro destino a Venezuela.

Llegó a La Guaira el 29 de octubre de 1823, el general Soublette lo envió al Perú, para apoyar al Libertador, es ascendido a general de brigada y destacado a las órdenes del general porteño Bartolomé Salóm en el sitio impuesto contra las fuerzas realistas del general Ramón Rodil, atrincherado en el puerto de El Callao, principal puerto y fortaleza del Perú, último reducto español en Hispanoamérica.

Valero como jefe del estado mayor del ejército sitiador, permaneció en Perú, desde el 6 de mayo hasta el 28 de diciembre de 1825.

General Antonio Vicente Valero de Bernabé Pacheco

A comienzos de 1826, es enviado a Panamá a las órdenes del general José María Carreño, para proteger las fortalezas contra las posibles incursiones realistas procedentes de Cuba y Puerto Rico. Al regresar a Venezuela en 1826, junto a otros oficiales fue designado para redactar: *”La Ordenanza Militar de Venezuela”*,  importante documento para regularizar al estamento militar.

Fijó residencia en San Sebastián de los Reyes, dedicándose un tiempo a la siembra de café. Valero promocionaba con patriotismo y entusiasmo una expedición libertadora hacia Puerto Rico; mantenía permanente contacto con el grupo separatista de la isla.

El Libertador tenía prevista esta actividad emancipadora, esperando liberar primero al Perú y esperar las condiciones militares y políticas, que le permitieran llevar a cabo esta gran empresa con los generales Sucre, Páez y Urdaneta entre otros.

Designado en 1828 comandante general de los valles de Aragua, igualmente le asignaron en 1829, la comandancia de armas de Puerto Cabello, de allí fue trasladado a Caracas con igual nombramiento.

En 1830, ocupando el cargo de Secretario de Guerra y Marina, leal al Libertador no se adhirió a las decisiones del Congreso reunido en Valencia, prefiriendo el forzado exilio hacia Saint Thomas.

En los pocos tiempos libres, traducía libros del francés al castellano.

Estará presente en Caracas durante las exequias del Padre de la Patria en diciembre de 1842, al regreso de sus restos desde Santa Marta.

Al enviudar contrajo nupcias el 12 de febrero de 1846 con Trinidad Lara Martínez, con quien tuvo descendencia.

Valero Combatió junto al general Portocarrero y Juan Crisóstomo Falcón el 5 de abril de 1848 en Taratara (Falcón), contra el general Judas Tadeo Piñango.

Ascendido a general de división y nombrado en 1849 comandante de armas de Coro. Durante la Guerra Federal (1859-1863), apoyó a los generales Zamora y Falcón.

Expulsado de Venezuela por cuestiones políticas, en 1862, se trasladó a Bogotá, donde el presidente Mosqueda, lo designó Jefe del Estado Mayor del Ejército.

En Bogotá falleció el 7 de junio de 1863; sus restos fueron enterrados sin la presencia de los familiares. El presidente Antonio Guzmán Blanco, había dispuesto el traslado de sus restos al Panteón Nacional. No se ha podido cumplir la disposición, por cuanto los restos nunca se encontraron. Un monumento ecuestre  y una logia masónica en la población de Fajardo, recuerdan la actividad emancipadora del general Antonio Valero Bernabé.

eumenes7@gmail.com

 

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