Juan Barreto: “Ni Madurismo ni Guaidismo, que se vayan los dos”

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Barreto aseguró que Redes busca una nueva mayoría que cuente con legitimidad de origen, que le diga algo al país y que inicie un proceso de reinstitucionalización de la República

Alexander Arteaga entrevista para La Verdad del Zulia a Juan Barreto: Juan Barreto: “Ni Maduro ni Guaidó, que se vayan los dos”

La polarización política en Venezuela es un tema en el que convergen dos factores, uno representado por la administración de Nicolás Maduro y el otro por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó.

Cada uno cuenta con el respaldo de organizaciones democráticas que defienden las ideas opuestas de participar y abstenerse en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.

En medio de esa acentuada polarización, Juan Barreto, exalcalde de Caracas y presidente del partido político Redes, no renunciará al voto. Considera que es un derecho universal y no ejercerlo sería “caer en las limitaciones que pretende imponer el gobierno de Maduro”.

En entrevista exclusiva para La Verdad, Barreto detalló la alianza política que mantiene con Soluciones para Venezuela dirigida por Claudio Fermín. Además de la plancha que presentarán con miras a obtener los suficientes espacios en la denominada nueva Asamblea Nacional (AN).

Pregunta- ¿Cuál es su visión como partido y de qué lado de la balanza política venezolana su ubica?

Repuesta-Somos una formación política de distintos movimientos sociales. Nos autodefinimos como un movimiento de movimientos en movimiento, como una fuerza despolarizadora que pretende una nueva centralidad política. Hoy el centro político lo ocupa la polarización, el debate, la confrontación entre el guaidoismo y el madurismo. Nosotros creemos que más allá de estos factores, que no son más del 20 o 30 por ciento de la población, por fuera, en el margen, en los bordes, hay una anomalía salvaje que se resiste a que Venezuela sea consumida por los intereses de estas dos élites.

Todas las encuestas demuestran que entre el 70 y el 80 por ciento de los venezolanos, la abrumadora mayoría del país, rechazan a los dos polos.

Guaidó tiene entre 16 y 18 puntos en las encuestas que más lo favorecen y Maduro entre 9 y 11 puntos, de manera que los dos sumados pueden que estén alrededor del 30 por ciento. ¿Y dónde está el resto del país? Donde nos ubicamos y nos colocamos nosotros,  en la necesidad de construir una nueva fuerza política o un nuevo conjunto de fuerzas políticas que despolaricen a la nación, que faciliten un diálogo. Que se concrete en acuerdos a favor de los venezolanos y que podamos avanzar hacia una transición, una salida pacífica, negociada, acordada, constitucional y a favor de los intereses del pueblo.

Ni gobierno ni oposición. Ni Maduro ni Guaidó. Que se vayan los dos, allí nos colocamos nosotros.

¿Qué opina sobre el informe de la comisión de la ONU con referencia a los delitos de lesa humanidad adjudicados a Nicolás Maduro?

Los derechos humanos deberían ser un tema permanente, de vigilancia colectiva, al que debería abocarse permanentemente la Asamblea Nacional. Sin embargo, nuestro país ha vivido un proceso de desinstitucionalización producto de la agudización de la polarización.

Hoy no hay manera de ejercer la función contralora de la AN, informes van e informes vienen, es la palabra del gobierno contra la palabra de la oposición.

Las instituciones internacionales se contaminaron de este juego perverso de la polarización. Se hacen informes que habría que revisar, yo no los pongo en duda de una vez, no los descarto, creo que son una alerta, una alarma que se prende. Pero, hace falta que se cree desde la próxima Asamblea Nacional una verdadera comisión de la verdad, la reconciliación y la paz, integrada por sectores variopintos de los nuevos parlamentarios que lleguen a ese escenario. Que permitan de una buena vez saber dónde comienza y terminan la verdad y la mentira de los factores involucrados en la polarización.

Esto no significa que se estén negando estos informes. Llama la atención y debe ser atacado el asunto de manera urgente mientras se crea esa comisión  de la nueva AN que debe nacer con mucha legitimidad.  La Fiscalía General de la República, la casi ausente Defensoría del Pueblo, deberían abocarse a abrir la caja negra de los derechos humanos, hacer una auditoría a fondo y permitir acompañamiento internacional.

Además, mostrar de manera transparente la situación de cada una de las denuncias que se hacen caso por caso. Ni juicios sumarios y acompañamiento de esos juicios sumarios de manera automática, ni negación absoluta y solidaridad automática con la negación absoluta.

El partido político Redes y Juan Barreto se consideran la piedra en el zapato del gobierno de Maduro ¿A qué se debe ese calificativo?

Nosotros nos separamos de la alianza Polo Patriótico, cuando ya venía desintegrándose a partir de los resultados de 2015. En ese momento, comenzamos a tener contradicciones desde la época del presidente Chávez cuando crea al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Le dijimos en su momento a Chávez que cometía un error estratégico, que estaba liquidando la lógica movimientaria que lo había llevado al poder a través del MVR a favor de la lógica sectaria, del partidismo.

Allí comenzó nuestro deslinde, que se profundiza luego de la manera a dedo o autoritaria que se establecieron las candidaturas para el 2015. Luego veíamos que no se hacía nada en relación con la corrupción. Nosotros habíamos pedido que se publicara la lista Cadivi para que se creara un régimen especial que permitiera la restitución de los capitales fugados, la reapropiación por parte de la República, de bienes que estaban en manos distintas a la del propio Estado.

También denunciamos la corruptela en la industria petrolera. En ese momento se nos llamó traidores que le estábamos haciendo un flaco servicio a la República, que íbamos a bajar la calificación de Pdvsa a nivel mundial, que eso le hacía el juego a las transnacionales y en ese momento decidimos hacer tienda aparte. Ya éramos el Pepe Grillo del Polo Patriótico siempre llamando la atención y nos convertimos entonces en la piedrita en el zapato.

Luego de eso pagamos el costo de ser críticos, de ser auténticos y de exigir la verdad, cuando en el 2017 nos quitan la tarjeta y nos colocan al margen del Consejo Nacional Electoral.

¿Cuál es la estrategia que maneja para las parlamentarias del 6D, cuando factores de oposición indican que no existen las condiciones para participar?

Hay varios de estos factores que dicen que no existen las condiciones para participar en estas elecciones y se aferran a ciertas ideas absolutas que son válidas para Venezuela y cualquier parte del mundo. Hoy se habla desde sectores radicales vinculados al departamento de Estado de EEUU de que en Venezuela no existen condiciones. Uno se pregunta y cuándo serán esas condiciones. Ellos dicen que cuando salga Maduro y allí se cierra el círculo.

Es como cuando el perro que se muerde la cola y gira sobre sí mismo, mientras no salga Maduro no hay condiciones, aseguran los factores radicales.

Resulta que todo parece indicar que no bastan las buenas intenciones, la voluntad y los deseos para que Maduro salga. Hace falta una estrategia política en un proceso de acumulación de fuerzas. Las condiciones nunca estarán dadas en la medida que el gobierno se haga tiránico. Es como que uno dijera: ‘Como no hay plena libertad de expresión, hasta que no me den garantías plenas de que todos los venezolanos vamos a poder ejercer libremente nuestra expresión y nuestra opinión, entonces yo me niegue a escribir un tuit o me niegue a participar en cualquier entrevista’.

Es un contrasentido autolimitarse, por que el otro tiene las pretensiones de limitarme. Yo no puedo renunciar a mi derecho al voto, no es una graciosa concesión del poder, es un derecho universal ganado en lucha, en sangre, en sudor, en sacrificios. Nosotros, independientemente de que las condiciones no sean las ideales o las mejores, contra viento y marea vamos a participar.

La principal estrategia es estar presente en la lucha de la gente, presentar candidatos que tengan el reconocimiento del pueblo, que sean parte de sus luchas. El 80 por ciento de los candidatos de nuestra alianza con Soluciones son líderes sociales con base. Muchos han recibido amenazas, son perseguidos, pero la mayoría se mantiene firme al frente de su responsabilidad social y vamos a sacar muchos votos.

Nuestra estrategia es lograr una nueva mayoría que cuente con legitimidad de origen, que le diga algo al país y que desde la AN podamos comenzar un proceso de reinstitucionalización de la República de vuelta a la constitución. Un proceso de renovación de los poderes públicos básicos, para que podamos comenzar a construir y a transitar una ruta pacífica, democrática, dialogada y acordada, que nos saque de esta tragedia y de este laberinto.

¿Quiénes conforman Redes en el estado Zulia?

Muchísimos dirigentes sociales y dirigentes de base. Carlos Labrador, dirigente obrero; Kelly Orcial, dirigente obrero de la industria petrolera: Jhon Ferreira, dirigente del sector construcción, quien hasta hace poco fue el coordinador del partido; Doris Contreras, profesora universitaria; Joni Jiménez, dirigente obrero del Zulia; el dirigente indígena José Luis Hernández. Con estas personas, con estos jóvenes, con estos compañeros entregados a la lucha vamos a producir importantes transformaciones.

Alianza de Barreto con Soluciones

¿Cómo va la Alianza Democrática en la entidad zuliana?

Lo primero que hay que hacer es una gran alianza con el pueblo y entregarse a los intereses de la gente. No puede ser un acuerdo de cúpula, una alianza de élite, una componenda la que sustituya el legítimo anhelo que tienen los trabajadores de que sus dirigentes naturales ocupen los espacios representativos de las instituciones.

La democracia es que los dirigentes sociales se hagan de los partidos, se valgan de los partidos, se sirvan de los partidos para que puedan participar.

Nosotros vamos en la tarjeta de Soluciones para Venezuela en alianza con sindicatos, federaciones campesinas, gremios, educadores, jóvenes, mujeres, adultos de la tercera edad, con personas de la comunidad LGTB, religiosos y los indígenas.

¿Cómo describiría la alianza política con Claudio Fermín y que pretenden alcanzar a futuro? 

Desde hace más de dos años, Soluciones para Venezuela y Redes venimos trabajando en las bases programáticas de un entendimiento, de un acuerdo y hoy más que una alianza, tenemos una hermandad, una buena amistad. Hoy la alianza Redes – Soluciones es una realidad política que recorre y penetra los barrios, los caseríos, los poblados, las fábricas de todo nuestro país y lo hacemos sobre la base de un conjunto de principios que compartimos y necesitamos que el pueblo que también que lo comparta.

En primer lugar, defensa intransigente de nuestra soberanía, lucha contra el bloqueo y las sanciones y por una nueva relación internacional y de reconocimiento entre Venezuela y los distintos países del mundo.  En segundo lugar, defensa intransigente de nuestra constitución y reinstitucionalización del país, a partir de la instalación de la nueva AN, pacificar a nuestro país, reconciliarnos y reconciliarlo. Legitimidad política y social. En tercer lugar, acuerdos para la reactivación de la industria y el relanzamiento de nuestra economía, renegociación de la deuda, restructuración, aplazamiento de las cuotas y de los pagos de la deuda.

Consecución de préstamos y dinero fresco en condiciones favorables y preferenciales. Plan económico para recuperación de la moneda y el salario, plan de emergencia para la pequeña, mediana industria y el comercio. Plan de agenda parlamentaria de defensa de los intereses de los trabajadores y sobre los Derechos Humanos que tiene que ser un elemento permanente dentro  de toda democracia.

En este proceso debemos devolver las garantías, derechos sociales y políticos que han sido confiscados y conculcados por el Gobierno.

De lograrse una nueva mayoría en la Asamblea Nacional, llamar a un referéndum consultivo para restituir al dueño de la soberanía el poder constituyente originario y preguntarle con carácter vinculante, si quiere recortar el actual período de gobierno.

Eso nos podría llevar a una solución inmediata a que en seis meses, luego de las elecciones, estemos llevando a cabo unas nuevas elecciones, saliendo del referéndum consultivo, que se podría hacer saliendo del 5 de enero luego de juramentarse la nueva directiva de la AN. En la siguiente sesión se presentaría el proyecto, se activa el artículo 70 y el artículo 71 que permite que por mayoría simple la Asamblea Constituyente llama a dicho referéndum consultivo en dos meses.

Luego se organiza y junto con las elecciones de gobernadores en seis meses estaríamos ya a unas elecciones de la Presidencia de la República y Poder Ejecutivo Nacional.

Guaidó «es un cipayo»

¿Ha sostenido algún acercamiento o conversación con Juan Guaidó?

Nosotros no hemos tenido ningún tipo de contacto ni relación con él, porque el señor Juan Guaidó es un empleado de la Casa Blanca. Lo demostró Usaid cuando rindió cuentas en diciembre ante el departamento de Estado de EEUU, que Guaidó recibe desde esa fuente de financiamiento 128 millones de dólares para los programas, proyectos y movilizaciones.  Él es un empleado muy bien pagado de la Casa Blanca, que obedece sus  órdenes y a sus intereses. Es un cipayo y si nosotros tuviésemos que reunirnos con alguien sería con el dueño del circo no con los payasos.

Debe haber un acuerdo nacional, para recuperar los espacios del diálogo, a favor del bienestar del pueblo. Creemos en el diálogo con todo el mundo, pero creemos que Guaidó no representa los intereses del pueblo. Si tenemos que conversar con él lo haremos pero con condiciones transparentes, igual con Maduro. Nosotros estábamos dispuestos a entrar en la mesa de diálogo, los únicos que no quisieron que entráramos fue la misma mesa de diálogo.

¿Cuál es su posición respecto a la gasolina y los servicios públicos en el país?  

Es lamentable que un país que se autoabastecía con una capacidad de producción de un millón 300 mil barriles diarios y la producción promedio era de un millón o un millón cien mil de barriles, exportaba el 40 por ciento de la gasolina que producía,  hoy tiene que estar trayendo gasolina de baja calidad y bajo octanaje, sin que pase pruebas de control, sin que sepa cuál es el valor real de esa gasolina, con un secretismo y poca transparencia en el manejo de esta importación que debería ser innecesaria y que necesitamos los venezolanos.

Hacemos votos para que la República recupere la capacidad de autoabastecerse desde el punto de vista energético y nos alegramos cada vez que se anuncia que vuelve a arrancar la refinería El Palito. Exigimos que se realice una auditoría a toda la industria petrolera, particularmente a las refinerías. Los servicios públicos son víctimas de la desinversión, la desidia, la mala gerencia, la incapacidad y la corrupción, nosotros hemos denunciados todos estas deficiencias ante el gobierno actual.

 

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