25 años de “revolución” y ¿qué tenemos? Venezuela en terapia intensiva, con la economía en coma y la democracia en el forense. Y en medio de este velorio nacional, ¡nos invitan a una fiesta electoral! ¡Qué ironía!
A 13 días del “evento”, la campaña está más fría que habitantes del polo Norte. Los candidatos, cual zombis de reality show, intentan vendernos una narrativa que ni ellos creen. Nadie se chupa el dedo y ahora la llama de resistencia ciudadana se aviva y toma vuelo como Guacamayas en libertad.
¿Quién en su sano juicio se apunta a este sainete? ¿Quién quiere ser extra en la película de terror del fraude? ¡Ni siquiera los pingüinos del Polo Norte son tan ingenuos!
Las horas pasan, y la resistencia crece. El fraude avanza, sí, pero como una marcha fúnebre. ¡Y los dolientes son los mismos que cavaron la tumba de la democracia!
Nosotros, los ciudadanos, seremos el público silencioso, el juez que observa y denuncia. ¡Que bailen con su muerto! Que se repartan las migajas entre ellos, mientras nosotros, con nuestro silencio atronador, les recordamos: ¡el 28J no se olvida!
El 25M, ¡que se queden solos con su fraude! Que su fiesta sea un funeral, y nuestro silencio, el epitafio de su farsa.
Ciudadano Libertario.